
¿Necesitas una página web de arquitecto?, ¿necesitas tener tarjetas de presentación? probablemente no, o sí, depende. Son varios los factores que determinarán la necesidad de tener o no tu propia página web.
¿Dónde estoy? ¿a dónde quiero ir?
Dependiendo de el punto en el que te encuentres puede interesarte más o menos tener una web donde mostrar tus habilidades. Probablemente para un estudiante en primero de carrera la necesidad de tener una web sea realmente baja, o para un trabajador por cuenta ajena, que cuenta con una estabilidad en su empresa y no tiene intenciones de grandes cambios.
Por otra parte, si estás buscando trabajo de forma activa o estás pensando en cambiar tu rumbo laboral, o si simplemente te apetece tener un espacio propio a donde poder redirigir a posibles clientes, contactos o personal de recursos humanos, en ese caso una web puede ayudarte a transmitir profesionalidad y transparencia.
¿Simple escaparate?
Muchas webs se plantean como un escaparate donde mostrar quién eres y qué has hecho. Esto está muy bien, siendo un complemento perfecto de un cv y una tarjeta de presentación en el ámbito digital. Podrás mostrar de forma más dinámica, visual y detallada tus puntos fuertes. Sin embargo, el potencial de tener una web va mucho más alla de ser un escaparate estático, es aquí donde entra el uso de un blog.
“El mejor activo online que puedes tener es tu página web, todavía más eficaz si incluye blog. En ella puedes mostrarte, ganar visibilidad, autoridad, dar a conocer tu propuesta de valor… Si haces un buen trabajo, puede ser un elemento decisivo a la hora de contratarte.“
Coachingarquitectos
Errores de un arquitecto en paroEn tu blog podrás escribir artículos sobre temas que te interesan y en los que estás especializado, atrayendo el interés de tus lectores, mostrando lo que sabes e interactuando con ellos. El hecho de compartir conocimientos, además de darte más visibilidad, puedes significar ampliar tu red de contactos de forma exponencial. Es decir, más allá de una mera presencia o un portfolio, deberías ver tu web como una plataforma con la cual crear oportunidades.
“Nadie contrata a quien no conoce“
Javier Quintana
El proceso comercial del arquitectoPocas cosas son blancas o negras, como en todo, habrá puntos discutibles sobre la necesidad de tener o no una página web propia. En lo que probablemente estemos de acuerdo es que teniendo una tienes muy poco que perder y mucho que ganar, es decir, raramente te hará mal tener tu propia página web profesional. Podríamos clasificar esta situación como una asimetría de convexidad positiva, en palabras de Nicolas Taleb en su libro Antifrágil, en la cual los riesgos a los que nos estaríamos enfrentando son muy bajos y conocidos, mientras que los potenciales beneficios son muy altos.
Hoy termino este post enlazando a este interesante post de Joan sobre Cómo diseñar tu web de arquitectura, otro día veremos varias opciones para materializar nuestra propia web.